El tripartito de Castellón salva la Pérgola del parque Ribalta que Bloc y PSPV querían derribar en 2006
No sólo la Conselleria de Cultura ha cambiado de criterio sobre el futuro del recinto municipal de La Pérgola al autorizar su reforma integral cifrada en 2,5 millones de euros que pagarán el Ayuntamiento de Castellón y fondos europeos al 50% y cuya contratación fue aprobada este jueves por la Junta de Gobierno local. También dos de los tres grupos políticos que conforman el equipo de gobierno apuestan ahora por reformar el edificio, cuando en el año 2006 en la oposición, defendieron el derribo que, a su vez, anunció el PP en la Alcaldía.
Si el 31 de enero de 2006, el edil de Urbanismo y Obras, Javier Moliner, manifestó que se iba a proceder al derribo de La Pérgola, a instancias de la Conselleria de Cultura, puesto que «esa estructura ya ha agotado su uso para la ciudad», 24 horas después, el 1 de febrero, los únicos dos grupos en la oposición de aquella corporación, coindieron con los populares. El portavoz socialista, Ignacio Subías, no sólo apostó también por la recuperación del antiguo jardín romántico, sino también de la Font del Piliuet, que ocupaba un rincón de aquella pérgola diseñada en 1869 en un parque Ribalta que fue declarado conjunto histórico artístico el 18 de junio 1981.
Por su parte, el nacionalista Enric Nomdedéu al frente del Bloc -el partido mayoritorio en la actual coalición de Compromís-, se sumó a la demolición, con una puntualización: que el jardín primigenio que se recuperase tuviera usos propios del siglo XXI. «Ahora es raro ver bailar pasodobles», declaró el portavoz del Bloc en relación a que el parterre fue escenario de bailes y verbenas cuando aquellas eran de las pocas distracciones con que contaban los castellonenses hasta la década de los 70.